miércoles, 29 de octubre de 2008

Fernando Luis Chivite, LA TAPIA AMARILLA

Los hombres dicen lo que ven. Miran a su alrededor y dicen lo que ven. Nombran las cosas para poseerlas pero lo único que consiguen es abrir abismos. Abismos y heridas. Creen elevarse con las palabras pero lo único que consiguen es caer en las palabras. Creen purgarse con las palabras, creen tonificarse y curarse con ellas, pero lo único que consiguen es herirse una y otra vez. Lo único que consiguen es dañarse con las palabras y enfermar por causa de las palabras una y otra vez.