miércoles, 29 de septiembre de 2010

NO IMPORTA, Agota Kristof

No tengo ganas de volver a casa porque el fregadero está atascado, pero tampoco tengo ganas de caminar así que me detengo en la acera de espaldas a un gran almacén, miró cómo la gente entra y sale y pienso que los que salen deberían quedarse dentro y los que entran deberían quedarse fuera, eso ahorraría bastante movimiento y bastante cansancio.

Sería un buen consejo para darles, pero no escucharían. Así que no digo nada, aprovecho el calor que sale de la tienda porque las puertas están constantemente abiertas y me siento casi tan bien como hace un rato, sentado en mi habitación.