viernes, 23 de enero de 2009

MÁRIO DE SÁ CARNEIRO, Yo mismo y el otro

Lisboa, 1907 - Octubre, 12

Soy un puñal de oro cuya lámina se ha quedado roma.

Mi alma es aguda —vibra al tomar impulso. Sólo mi cuerpo es pesdo. Tengo mi alma presa en el zaguán.

No soy cobarde frente al miedo. Sólo soy cobarde frente a mí mismo. ¡Ah! Si yo fuese hermoso...

Me avergüenzo de lo grande que me siento.

Soy tan grande que sólo puedo contarme mis miedos a mí mismo.

Nunca tuve miedo. Tuve siempre frío.